Una novela fresca y divertida
  de la nueva narrativa alemana
  Felizia  está predestinada a seguir con el negocio familiar: una modesta funeraria en un  pequeño pueblo del norte de Alemania. Ya desde muy pronto su padre, hombre  discreto y previsor, la introduce en la profesión.   La niña tendrá que  habituarse enseguida a la manipulación de cadáveres y al no menos delicado  trato con los parientes del fallecido. Pese a la instrucción recibida y a los  deseos paternos, la Felizia adulta abandona el nido familiar y, gracias a la  habilidad adquirida para escuchar y aconsejar en los momentos de crisis, se  gana la vida como pitonisa, al tiempo que la endulza con sus relaciones con los  hombres, todas ellas mediatizadas por la distancia de seguridad que las pompas  fúnebres requieren.
Mareike Krügel, manejando un brillante sentido del humor, a  ratos negro, a ratos profundamente humano, se presenta al público español con  una novela de deliciosa y ágil lectura.